Bob Gruen, Brad Elterman, Jenny Lens, Mick Rock y otros nombres famosos se han encargado de fotografiar a rockeros y músicos icónicos de todos los tiempos. A través de distintos estilos y enfoques, hemos visto desde imágenes de Iggy Pop y Blondie en el club CBGB, hasta los conciertos de The Runaways en Japón, pero solo un nombre es el que todos recuerdan cuando hablamos de pinturas de famosos: Denny Dent.
El arte de pintar retratos rockeros llegó a la vida de Dent cuando a principios de los ’80, intercambiaba sus retratos por vasos de cerveza en Las Vegas. Allí fue contactado por un promotor quien lo incluyó como número de apertura para conciertos de Steppenwolf y B-52’s, donde en vivo pintaba y hacía gala de su destreza: con tres pinceles en cada mano Dent utilizaba una fuerza nunca antes vista para formar obras que podían ser vendidas hasta en U$60,000 dólares. Así logró el reconocimiento y una aparición legendaria como parte de Woodstock 1994, donde una nueva generación fue testigo de su talento.
El artista, quien según su familia sería descendiente del famoso pintor italiano Tiziano, falleció el año 2004 debido a una falla de órganos múltiple. Pero desde Elvis hasta Jimmi Hendrix, pasando por Billy Joel, Bob Marley y Kurt Cobain, todos los ídolos rockeros le inspiraron a construir un portafolio que hoy está en distintas subastas, y que dejó el camino listo para otros artistas que se atreven a pintar a cantantes y solistas.
Fotos: Looking Glass Gallery, Live Auctioners, ArtBrokerage.
