Hace poco estuvo en Chile BodyMap, una pareja de diseñadores ingleses que en los años 80 la rompió al atreverse con conceptos de moda que tal vez hoy son comunes (reciclaje, deconstrucción, desfiles cercanos a la performance) pero que entonces eran una insolencia. No son tan famosos hoy, pero a sus desfiles iba hasta Boy George…eran todo un acontecimiento. Me tocó hacer una nota sobre ellos en Revista Mujer, antes de conocerlos, y luego, cuando llegaron a Chile, me junté con ellos para conversar en el Museo de la Moda (donde inauguraron una exposición) y luego moderé un panel organizado por el museo en el GAM. Pero bueno. Esto no es lo importante; lo escribo sólo para que sepan el contexto de todo lo que viene a continuación.
Aparte de que convesar con ellos fue un agrado, me quedaron dando vuelta hartas cosas que, me parece, son una lección para los diseñadores jóvenes hoy.
1. Lo central es pasarlo bien. A ellos les daba lo mismo si las ideas eran buenas o no, arriesgadas o no, factibles de hacer o no. Simplemente, se dejaban llevar por la creatividad, sin pensar demasiado y, especialmente, sin evaluar si lo que estaban haciendo iba a ser exitoso o no. Just do it. Al oirlos hablar, se me venía a la cabeza a cada rato este slogan de Nike, que se traduce como “sólo hazlo”. Estaban metidos en su propio rollo, libres de presiones exititas propias o ajenas. Pienso que eso tuvo mucho que ver con lo bien que les fue. Ellos lo estaban pasando chancho y todos sus seguidores buscaban tener algo de eso a través de su ropa o asistiendo a sus desfiles.
2. El valor del trabajo colaborativo. Como entendían la moda como una vertiente más del arte, los BodyMap trabajan mucho con amigos que venían del mundo de la danza, de la performance, de las artes visuales. Todos iban aportando al proyecto, sin necesidad de retorno alguno, con una generosidad que me parece que hoy casi no se ve. Aportaban porque estaban en la misma sintonía intelectual y política (contra el establishment) pero también porque, volviendo al punto uno, lo pasaban bien.
3. La fama no es lo importante. A los ingleses les llama la atención cómo hoy los creadores de moda están tan centrados en hacerse famosos, algo que para ellos estaba lejos de ser una prioridad, y le echan gran parte de la culpa a internet. Dicen que hoy internet facilita las cosas, hace la fama más alcanzable pero a la vez más efímera, desechable, descartable. Tener los famosos 15 minutos de fama de los que hablaba Warhol es ciertamente más fácil hoy y por eso más gente cree que puede ser una celebridad. Pero la fama es ingrata y en este escenario lo es aún más. Especialmente si la fama está vacía de contenidos. No es que me parezca mala la fama. Pero rescato el llamado de BodyMap a generar primero una propuesta potente, que por si sola haga conocido a su creador. Me parece que los diseñadores debieran aspirar a estar en los libros de diseño, más que en las revistas de farándula, ¿no?
